¿Para qué aprender la historia?

Desde un punto de vista histórico la enseñanza de la historia tiene su origen en la conformación de los estados nacionales que requerían del fortalecimiento del espíritu nacionalista de los ciudadanos, ello fue posible a partir de la creación de símbolos unificadores; en la actualidad el objetivo es diferente ya que se pretende no solo el reconocimiento de hechos del pasado que han sembrado las raíces del presente, sino tambien lograr que el alumno tome conciencia de que el mismo es un partícipe de la historia y que sus actos hoy van a repercutir en el futuro, creando así empatía con personajes del pasado. Para lograr lo anterior es importante utilizar métodos y estrategias que permitan el análisis y la reflexión, mas alla de la simple memorización a corto plazo como se hacia en el pasado. Sin embargo aunque pareciera que tenemos la fórmula para lograr óptimos resultados, es fundamental que el maestro siga actualizandose de manera continua para no quedar desfasado con respecto no solo a los métodos que facilitaran su labor, sino tambien con las necesidades de aprendizaje que tienen los alumnos en un mundo globalizado.